Perdon

Perdón

Por no poder abrir los ojos,
Por no dar las buenas noches
Por manchar el suelo de rojo
Por no regresar a casa en coche

Perdón

Por no poder besar más labios
Por no poder siquiera hablarles
Por no ser cada año más sabio
Por no poder siquiera tocarles

Perdón

Por no hablar más con mi viejo
Por no poder
Por no poder verme en un espejo
Por no poder

Perdón

Porque el plomo partió mi alma
Destruyendo mi futuro y mis sueños.
Porque destruyó la paz y la calma
Creyendo de mi vida ser dueño

Perdón, maldito perdón, puto perdón.

Donde habita

Un pescado sin espinas
Un camino recorrido
Por sus piedras lo camina
El silencio y lo prohibido

De puntillas por si hay minas
Con el miedo y un silbido
Una canción de Sabina
Donde habita el olvido

Ausencia de esencia

En dos puntos distantes
Dos personas la luna miran
Cómo caminantes errantes
Que de un rojo hilo tiran

Y extrañan su ausencia
Maldiciendo a esa luna
Queriendo la presencia
Que uno y uno suma

Y congela el momento
Como un fugaz instante
Con el corazón contento
Y el hilo del errante...